jueves, 5 de septiembre de 2019



HOTEL MADINAT
UN HOTEL QUE NOS TRASLADA AL PASADO DE UNA CÓRDOBA CULTURAL Y PATRIMONIAL




Córdoba tiene hoteles en casas señoriales y casas-palacio que tienen historia. Además de alojarte en hoteles con un encanto especial y hacer que te traslades a tiempos remotos, también disfrutarás de todos los lujos que estos te ofrecen. Ubicados, como no, en sitios privilegiados de la ciudad. 


En esta ocasión, voy a hablar del Hotel Madinat. Este hotel de cuatro estrellas se encuentra en la calle de las Cabezas, bonita calle situada en el casco antiguo de la ciudad. Al entrar en el hotel, su patio muestra restos de la casa que fue. Exquisitamente decorado, mezcla lo antiguo con lo moderno. Este hotel está enclavado en lo que era una casa señorial del siglo XVIII que posteriormente fue regentada por la burguesía entre los siglos XIX y XX.


Todo el hotel está decorado con materiales antiguos pertenecientes a la casa, dejando que el visitante se adentre en el pasado entre columnas, suelos, vidrieras, enseres y espacios. El hotel nos sumerge en un ambiente que nos hace recordar el pasado histórico y cultural de la ciudad de Córdoba, tanto en su entorno, como en el mismo hotel. Se pueden apreciar restos arqueológicos por todo el hotel, como un pozo arabigoandalusí de forma elíptica, situado en el extremo del patio, así como columnas, suelos y enseres propios de una casa típica andaluza. 

Imagen de la casa antes de la reforma del hotel.



Desde alguna habitación se puede contemplar la Casa de las Cabezas que, según un cantar de Gesta, el de los Siete Infantes de Lara, esta casa era el antiguo alcázar de Almanzor donde, según la leyenda, estuvo prisionero Gonzalo Gustioz y en cuyo callejón de siete arcos colgaron las cabezas de sus desgraciados infantes, de ahí el nombre de la calle.  



Todas sus 11 habitaciones son diferentes, decoradas de una manera exquisita y envueltas en detalles con materiales antiguos de la casa, mezclando modernidad y comodidad en un ambiente exclusivo y diferente. Los frescos de sus paredes y sus suelos, recuperados en forma de mosaicos, vislumbran la riqueza y suntuosidad de la casa y de sus dueños.




En sus terrazas, se puede disfrutar de unas maravillosas vistas del casco antiguo de la ciudad.
 


El hotel ofrece momentos de relajación y desconexión a sus clientes en su Hamman, donde se puede tomar un baño de sal, entre velas y aromas, además de disfrutar de un exquisito té andalusí. 



Un hotel que te ofrece múltiples comodidades en un ambiente que desprende pasado e historia, que está enclavado en un entorno cuyas callejas y casas de leyenda te trasladan a vivir entre el pasado y el presente de una ciudad con riqueza patrimonial y cultural.


Agradezco a Mansur Lakrad y a Manuel su atención y el tiempo que dedicaron a enseñarme el hotel.



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